...no creía en lo que veía, y siempre sospechaba que en cada persona la vida auténtica, la más interesante, transcurría bajo el manto del misterio, como bajo el manto de la noche...

Antón Chéjov, La dama del perrito

jueves, 14 de febrero de 2013

silábica


(Fotografía de Saul Leiter)




Al principio resulta tan lejano su rumor. Emerge como la corriente menuda y fina de una fontana. Allí bebo, allí veo por primera vez su rostro. Su asonancia fluye como un aura en torno a mi silueta. Prevé la distancia y aguarda. Aún no distingo con claridad cómo acecha. Opiácea sensación. Prurito que se instala lentamente sobre mi piel. Fruto silvestre que crece sobre mis pasos ingenuos. Tibia y húmeda eclosión de mis raíces. Agarrotado crecimiento que cierra el perímetro de mis ansias. Vértigo amargo en cuya espiral me enredo. Las  primeras heridas desnudan mis entrañas. Extrema ductilidad que me aparta inexplicablemente del mundo. Brindas por mi disolución apenas alzas tu copa invisible. Me ofreces renacer como la floresta que me rodea. Sinuosa constricción de todos mis órganos. Perversa voluntad que va ocupando cada hueco que he dejado al descubierto. Me rindes atrapándome en tu amable reverberación. Unísona llamada que se desplaza bárbara sobre cada defensa que voy abandonando. Yo, que no creo en los nombres, agudizo los sentidos ante tus arcanas sílabas. No me resisto a tu sonido frágil que, al impactar sobre mis vísceras, se vuelve oneroso. Empiezo a advertir tu faz. Extiendo las manos y casi descubro tus facciones. Con trazos ágiles de carboncillo difuminas mi perfil. Es tarde para que yo emprenda la retirada. Ay, impía sustancia que me salpicas. Blasfemo goteo que se derrama por cada fisura que ha abierto la fiebre. Dime, dime dónde habitas cuando no te manifiestas. Áspid mórbido que engulles mi boca hasta ahogar las palabras. Epílogo de mi límite que te extiendes a través de mis grietas. Me derribas sobre una nube y allí, sometido, exiges que deletree tu nombre: las-ci-via.



21 comentarios:

  1. ¿poesía?...No sé, pero has retratado a carbón la cara del amor a lo "desconocido".
    Cordial saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¿...O biología? Sí, estos retratos tienen que hacerse a carboncillo. Cordial.

      Eliminar
  2. a veces es inútil resistirse a las tentaciones... :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ...Una vez traspasada cierta frontera que solo el cuerpo de cada cual sabe.

      Eliminar
  3. La entrega que llega a ser ansiada a esa colonización que se infiltra y se hace soberana de todas las criaturas que nos habitan.

    La he leído varias veces, te felicito por esta Las-ci-via

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Das en la diana: como una invasión que se va aproximando hasta tomarlo a uno. Donde las fantasías y las percepciones físicas se confunden. Gra-cias.

      Eliminar
  4. gracias por seguirme
    realmente magnifico tu blog y palabras

    ResponderEliminar
  5. Pensé en una mujer lasciva, escritura desbordante de lascivia...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¿Un ser, una entidad, un fantasma? Acaso un acontecimiento.

      Eliminar
  6. pensé primero.. qué dróga será.. uhmm que lo diga ya.. luego pensé que era une estado febril producto de estos resfriados de invierno.. el final me ha impactado.. vuelvo a leerlo.. sonrío.. b besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. O tal vez auto adicción, quién sabe. Gracias por tu ironía, Ico. Y por hablar del proceso de recepción el texto en ti misma.

      Eliminar
  7. ¿La Idea es un tipo de lascivia? ¿Quizá saberla bajo nuestro dominio, quizá encontrar el lenguaje que la lleve desde el cerebro al papel, en (otras) palabras, dominarla? ¿La escritura, una clase de onanismo pensando en?
    Perdón, mi sombra a veces me corrompe... Fantasmas.

    PeterP.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No va por mal camino, no. Yo también me hago preguntas tales o análogas. Si Eros y Tánatos son los polos del eje vital, ¿no estarán jugando, interfiriendo, alternando roles continuamente? Las sombras, Peter, o la sed de nuestras sombras que a veces no distinguimos si es la de las figuras carnosas. Salut.

      Eliminar
  8. Me faltan las palabras para describir el efecto de tus textos...los puedo sentir! Fenomenal, como siempre!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Te las puesto prestar, Lucy, aquí hay muchas...por cierto, ando un poco despistado respecto a cuál es tu blog...¿me lo aclaras por aquí o a la dirección electrónica? Gracias.

      Eliminar
  9. Es que no tengo un blog, soy solo una lectora voraz del tuyo ;-)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Vaya, cómo suena eso de voracidad. Calma, mucha calma con las letras...que no nos atraganten (suelo decírmelo a mí mismo)

      Eliminar
    2. No, seguro que no: nos estimulan!
      (lsd.lucia@gmail.com)

      Eliminar